Esta exposición invita a descubrir las artes escénicas tradicionales de Asia a través de su profunda conexión entre materia, gesto y espiritualidad. El recorrido nos sumerge en un universo donde la materia no solo representa, sino que ritualiza; donde el gesto no solo comunica, sino que consagra.

El teatro asiático no puede comprenderse sin su dimensión espiritual, pedagógica y comunitaria. Cada pieza expuesta evoca una práctica escénica de carácter ceremonial, devocional o festiva, portadora de memoria viva: objetos performativos que, lejos de ser contemplados como reliquias, se presentan como cuerpos simbólicos, a la espera de ser activados por la mirada.

La muestra propone un viaje del objeto al gesto, de lo tangible a lo invisible. Las máscaras del Talnori de Corea, las sombras del Nang Talung de Tailandia, los títeres del Putali Naach de Nepal y las figuras danzantes de Tailandia e India revelan no solo formas de arte, sino también formas de estar en el mundo.

Estos bienes culturales documentan la dimensión performativa de las religiones asiáticas —principalmente el hinduismo y el budismo—, así como de las creencias animistas, y su íntima relación con el cuerpo, la música y el espacio comunitario.